La primera premisa a tener en consideración ante un trabajo de digitalización 3D es planificar el
trabajo a realizar, ya que en ocasiones por una serie de cuestiones como, la importancia del
objeto, la dificultad de obtener permisos, la localización e incluso la disponibilidad de tiempo,
hacen que no se puedan repetir estos trabajos. Por esto hay que establecer un protocolo de
trabajo que nos ayude a optimizar recursos y tiempo, pero garantizando el éxito del trabajo.